viernes, 29 de diciembre de 2023

AMNISTÍA PARA CÉSAR APAZA Y LOS PRESOS POLÍTICOS

 

       Esta semana se conmemora el nacimiento del pequeño Emmanuel que significa paz para el mundo. El pequeño Niño Jesús llegó simbólicamente con esa esperanza; esa utopía de conseguir que un día todos los seres humanos se estrechen en un abrazo fraterno. Ese es su principal mensaje: el Amor.

            Las canciones que hacen referencia a ese momento hablan de una Noche de Paz, en la cual se espera que hasta la naturaleza participe en el encuentro de la Humanidad, luminosa, en quietud. Hermosura que se sublimiza en la Oda a la Alegría, cuando los hermanos escuchan el canto alegre del que espera un nuevo día.

            Este año, el festejo está ensombrecido con la tristeza y el llanto amargo. Belén, el lugar donde vino al mundo el Salvador, está teñido de sangre. Las fuerzas de represión israelíes dispararon el Tercer Domingo de Adviento contra feligreses que oraban en la Basílica de la Natividad, matando e hiriendo a inocentes.

            En otras regiones continúan los ataques contra la población civil: en Ucrania, en México, en Somalia, en Yemen. En decenas de ciudades habrá nuevos muertos estos días, más niños desamparados, más secuelas imborrables. Cientos de presidiarios se acumulan en las cárceles de Cuba, de Venezuela, de Nicaragua, de Haití, de El Salvador.

            En Bolivia, desde 2003 hay exiliados que no pueden retornar al país. Es decir, sólo disfrutaron del sistema democrático dos décadas. En 2006, las cárceles más inhóspitas se llenaron de presos políticos, sin causas legales, o sometidos a procesos kafkianos como en el caso del Hotel de las Américas.

            El gobierno de Luis Arce Catacora y David Choquehuanca Céspedes escogió un horizonte de venganza, de persecuciones y de apresamientos injustificados. Casi todos los presos políticos están encerrados sin poder ejercer su derecho a la defensa o de acudir a un tribunal independiente, incluyendo policías y militares. La expresidenta Jeanine Añez es una de las víctimas más notables.

            La orientación represiva de este régimen tiene entre sus principales ejecutores al abogado Iván Lima Magne que aparece para dar nuevas estocadas al ordenamiento jurídico que con tanta dificultad construían los bolivianos. Desde la narrativa del golpe de estado al nombramiento de personal descalificado o la prórroga de jueces, él da el tono.

            Eduardo del Castillo del Carpio, a pesar de su juventud, y Edmundo Novillo, a pesar de su trayectoria sindical, se encargan del rol represivo: espionajes, persecuciones, encarcelamientos. Preparan trampas con tufillo cubano y venezolano que utilizan como pretexto.

            El caso más notable y lamentable es el del presidente de los cocaleros yungueños César Apaza, víctima de una emboscada preparada desde algún espacio de la “seguridad nacional”. El brazo represivo de Arce usó a un testaferro para crear una paralela Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz. Cuando no necesitaron a Arnold Alanes lo expulsaron por la puerta trasera.

            Entre tanto, consiguieron incendiar la sede de los cocaleros. El método piromaniaco de Nerón es uno de los preferidos por los grupos de choque del MAS (de alguna forma cobijados por la propia Policía) para crear caos, aprovechar las turbas, alentar acciones violentas.

            Así consiguieron involucrar en “terrorismo” a Apaza para apoderarse de la tradicional organización cocalera paceña. César enfrenta una humillación que no se repite contra los feminicidas, los avasalladores, los pedófilos.

            Apaza está enfermo físicamente, además de presentar un agudo cuadro depresivo. Hasta Víctor Paz, precursor de la represión selectiva, liberó a sus enemigos políticos para que pasen la Noche Buena en sus hogares.

            ¿Dictará Luis Arce en esta Navidad una Amnistía para él o para los otros presos políticos? Es difícil esperar semejante gesto de grandeza.

 

 

 

TURISMO VIP EN BOLIVIA

 

            No existe mejor decisión para gastar los ahorros del año que recorrer la patria. Esta vez el paseo familiar optó por el sudoeste de Bolivia, para (re)conocer algunos paisajes y visitar por primera vez algunas ofertas. El resultado es absolutamente extraordinario y es otra muestra que el turismo VIP nacional y el turismo plateado (para la Tercera Edad) compiten con los estándares mundiales.

            Los emprendedores privados de la industria sin chimenea han optado por continuar con sus inversiones y con sus mejoras a pesar de la falta de acompañamiento de políticas públicas ni la promoción de los destinos turísticos del país. Al contrario, el No Estado es más un obstáculo que una ayuda y la amenaza de los violentos está siempre latente.

            En cambio, la oferta privada -desde las grandes iniciativas con décadas de experiencia hasta flamantes albergues familiares en comunidades- está lista para que el visitante pase días de ensueño: paisajes únicos; gente sencilla y amistosa; hospedajes cómodos y aseados; gastronomía diversa. A orillas del volcán Thunupa existen desayunos pueblerinos deliciosos; en los hoteles de sal de cinco estrellas, las cenas compiten con restaurantes internacionales bajo celajes irreproducibles; es posible almorzar en pleno Salar de Uyuni, seco o mojado, sin causar daños medioambientales en el imponente lugar.

            Es notable cómo ha evolucionado la propuesta de generación en generación. Los hijos/nietos de los pioneros estudiaron en Europa, cumplieron pasantías en cadenas famosas y saben cómo atender al extranjero más exigente. En otro artículo daré más detalles para alentar a las familias bolivianas.

            Las empresas contratan personal del lugar al cual entrenan y capacitan para una fina atención al cliente. Es interesante seguir las cadenas: hoteles que recomiendan tours; agencias que reservan menús en uno u otro destino para encontrar todo listo después de horas de viaje carretero; operadores que recomiendan transportistas responsables; conductores que conocen los rincones escondidos para degustar una merienda bajo molles y sauces.

            Los chefs seleccionan hortalizas y verduras de primera calidad producidas en Cochabamba; hay panecillos artesanales potosinos de todo tipo; mermeladas caseras de abuela; variedad de papa y tubérculos; jugo de linaza o de tumbo, helado de canela; vinos tarijeños; fruta de temporada; quesos frescos o elaborados; lácteos de la zona, carnes.

            Las reservas en los más de cien hoteles de Uyuni están agotadas; se ven decenas de buses con coreanos, rusos, franceses, alemanes, colombianos. Del turismo interno, los recepcionistas destacaron la cantidad de familias cruceñas que llegan al Salar. Los mejores restaurantes potosinos coinciden en señalar que 2023 fue un muy buen año para el rubro.

            El Sur está de moda y Potosí sigue como el número uno: la ciudad, el salar, Toro Toro, los Lípez, las minas, Tupiza y las rutas abiertas por la familia Mitru. La atracción del Salar que se proporciona por sí solo ha jalado la incorporación de más lugares.

En Sucre, un joven empresario ensaya una oferta única combinando visitas históricas tradicionales con la degustación gastronómica, desde los clásicos platillos chuquisaqueños hasta sofisticadas recetas logradas con el respaldo de “Gustu”. El turismo cultural se complementa con el turismo de aventura en una finca en el valle tropical, camino a Cochabamba: río cristalino, piscinas, paseos por arboledas; humintas, duraznos y chirimoyas; embutidos de origen alemán en pan recién horneado.

            La joya fue dormir varias noches en el Hotel Museo de Cayara, a pocos minutos de Potosí, casi a la vera del camino a Oruro. El contraste de un salón de película de Agatha Christie, lleno de objetos históricos y primorosos, con el confort del siglo XXI en todos los servicios produce un goce inédito.

            Muchas publicaciones alaban este lugar y su relato coincide con la realidad. Una casona del siglo XVI, refaccionada en más de una ocasión con gusto y sentido apropiado, alberga habitaciones adaptadas a la modernidad. Es otro hotel con lleno completo casi todo el año, incluso en invierno.

            La clave es el abanico de posibilidades para que cada turista -incluyendo la canosa sesentera- pueda elegir entre pasear por las huertas, subir cerros, leer al lado de la chimenea, jugar naipes, rezar en la capilla, escuchar en el patio colonial centenas de pajarillos, dormir la siesta, comprar yogur fresco en la lechería, tomar té inglés con pan, mermelada y mantequilla.

            ¿Era Bolivia o era un sueño?

            Era un sueño. Despartamos cuando BOA anunció el retraso de su vuelo por varias horas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

            En cuadro décadas, el número de niños con Síndrome de Down ha caído drásticamente. La razón de estas cifras no es porque la ciencia encontró métodos para superar ese trastorno genético, sino porque hay más madres que prefieren abortar cuando se enteran de que esperan un bebé con un cromosoma extra.

            Las preguntas quedan flotando. Seguramente para el feminismo fundamentalista, estas mujeres ejercen su derecho a decidir qué hacer con su cuerpo; a deshacerse de un ser que no tiene derecho a nacer; a esquivar un bulto que seguramente en el futuro les ocupará mucho tiempo en su agenda; a enfrentar a tiempo una dificultad que entorpecerá sus planes profesionales. El “riesgo” aumenta porque cada vez las mujeres, sobre todo de las de clases altas se embarazan cerca a los 40 años.

            El nacimiento de un niño con Síndrome de Down significa muchas veces que el nuevo ser presentará dificultades a nivel intelectual y de conocimiento, así como dolencias en distintos sistemas y quizá tendrá un corazón débil.

            Bajo la bandera de la “libertad de decidir”, mujeres que acceden a las tecnologías para conocer la salud de su feto optan por expulsarlo si no es como quisieran que sea. La prensa informó este año sobre el resultado de estudios en Europa: ocho de cada 10 embarazos con Síndrome de Down terminan en aborto; también se da la cifra del 54 por ciento. En España el 83 por ciento de esos embarazos no culminan en un nacimiento. En Inglaterra, el aborto puede ser legal incluso en la víspera del nacimiento de un niño con el Síndrome de Down.

            Para algunos, algunas o algunes como les gusta decir, es el ejercicio de un derecho femenino y punto. El único asunto es que sea legal y con buenas condiciones higiénicas. En el caso de China la mayoría de los fetos abortados son mujercitas.

            En muchas ocasiones, de manera privada o pública, he manifestado mi oposición al aborto y he dado mis razones personales, propias de mi mismidad porque no obedecen ni a religiones ni a ideologías. No las repetiré.

            En cambio, quiero recordar dos momentos. El primero hace 25 años, cuando organizaciones feministas bolivianas financiadas desde el exterior quisieron encontrar una brecha para propagandizar el aborto legal con el asunto de los fetos con Síndrome de Down u otra malformación. Como suele suceder, recibí abucheos cuando expresé mi posición.

            ¿Es este el derecho a la “igualdad”, a la “libertad”, a la “fraternidad”? ¿Los diferentes tienen la oportunidad de llegar a este mundo, de nacer, de vivir? O, son parte de los desechables. La divergencia, la disparidad, las distintas posibilidades de recibir el soplo divino de la Vida, son los mayores signos de la existencia de una inteligencia superior, de la Divinidad.

            El otro momento que deseo recordar, con mucho amor, es la historia de Raquelita y en ella recordar y abrazar a muchas personas que conocí con Síndrome de Down. Al parecer sus limitaciones en unas áreas están compensadas por una infinita capacidad que tienen de dar amor, de provocar amor, de dar sentido a la Vida. Existen maravillosos testimonios familiares.

            Actualmente, en víspera de la Natividad, se desarrolla la lucha de otras mujeres, algunas con el Síndrome como Heidi Crowter, contra esta nueva forma de discriminación. También se manifiestan artistas, médicos y humanistas para luchar contra esta forma perversa de las corrientes abortistas.

            Por otra parte, en España, comienzan a difundirse más los casos de trastornos psicológicos, de traumas y de ansiedades que padecen mujeres que han abortado. Ya hay clínicas especializadas en este otro síndrome. Quizá nadie les avisó a tiempo que el feto abortado estará siempre en sus vidas, incluso en su espacio familiar ampliado, presente y futuro.

 

 

 

viernes, 8 de diciembre de 2023

BELEN SIN NAVIDAD

 

          Una de las imágenes del Evangelio que más impresiona es el desplazamiento de María embarazada desde su hogar de Nazaret (al norte) hacia Belén (al centro) después de haber pasado tres meses de su espera junto a su prima Isabel, en un tercer territorio. Más tarde, la joven madre huyó con su Divino hijito en brazos a Egipto, donde encontró refugio. Es una señal imperecedera: tantas madres que dan a luz lejos de su casa. Por otro lado, Jesús, el Hijo del Hombre, escoge ser de todas partes, universal, sin fronteras.

Actualmente Nazaret está en el norte del estado de Israel, aunque la mayoría de su población es árabe y profesa la religión musulmana o católica. Tiene unos 75 mil habitantes, casi igual que Quillacollo; es más pequeña que Riberalta. Como otras poblaciones palestinas, sus habitantes padecen desde 1948 el desplazamiento constante.

            Belén queda en el centro de Cisjordania, en Palestina, al sur de Jerusalén. Es tan limitada como Patacamaya o como Camiri, pero es una de las ciudades más famosas del mundo. El Nuevo Testamento la cita como la ciudad que albergó en un humilde pesebre el nacimiento del Mesías, bajo el Imperio Romano. Ahí están vitales sitios sagrados para los millones de cristianos de todo el mundo.

            La mayoría de su población es árabe y practica la religión musulmana conviviendo con la minoría de cristianos ortodoxos desde siglos. Los treinta mil habitantes ocupan un espacio bajo la Autoridad Palestina, cercado por murallas y puestos de control del gobierno de Israel. Como miles de palestinos no tienen la libertad de salir o entrar y son hostigados permanentemente por los avasalladores judíos de asentamientos ilegales.

            Belén vivía del turismo, principalmente de los católicos europeos y latinoamericanos. La temporada alta era fin de año, en las proximidades de la fecha escogida para conmemorar el nacimiento de Cristo, 25 de diciembre. La Basílica de la Natividad era uno de los sitios ineludibles para los peregrinos.

            Desde hace algunos años (antes del 7 de octubre de 2023) los habitantes de Belén y los sacerdotes (franciscanos) que custodian los sitios sagrados denunciaron los permanentes abusos del personal de seguridad del gobierno de Israel y de judíos ortodoxos contra ellos.

            Avasallamientos y atropellos que este año han alcanzado límites incontrolables al punto que la mayoría de los hoteles cancelaron visitas, cientos de locales de comida o de alojamiento cerraron sus puertas. Como ciudadanos de Cisjordania, los palestinos en Belén viven bajo una prisión al aire libre.

            La violencia en este territorio palestino, igual que en el este de Jerusalén, aparece poco en los noticieros por ser menos numerosa que la catástrofe humanitaria en Gaza, pero no por ello menos dramática. Hace meses, por ejemplo, que el sistema israelí no deja que los enfermos de cáncer se curen en hospitales palestinos y prohíbe en Gaza máquinas de radioterapia porque señala que podrían convertirlas en armas.

            En la Franja, en sesenta días, más de 6. 500 Jesusitos han sido asesinados por orden de Benjamín Netanyahu y miles de miles han sido mutilados o han quedado huérfanos. Han sepultado en ocho semanas más niños que en todas las guerras del mundo del siglo XXI.

La conmoción mundial no toca a Tel Aviv. Al contrario, se anuncian más ejercicios: drones contra bebés; bombas contra camillas; metralla contra pesebres. Este 2023, como pocas veces desde la época de San Francisco, Belén no tendrá Navidad. No llegará la Buena Nueva a los hogares de piel canela y pestañas largas.

Las campanas no repicarán porque no habrá Noche Buena. Habrá más luto.

LUPE CAJÍAS

 

            Una de las imágenes del Evangelio que más impresiona es el desplazamiento de María embarazada desde su hogar de Nazaret (al norte) hacia Belén (al centro) después de haber pasado tres meses de su espera junto a su prima Isabel, en un tercer territorio. Más tarde, la joven madre huyó con su Divino hijito en brazos a Egipto, donde encontró refugio. Es una señal imperecedera: tantas madres que dan a luz lejos de su casa. Por otro lado, Jesús, el Hijo del Hombre, escoge ser de todas partes, universal, sin fronteras.

Actualmente Nazaret está en el norte del estado de Israel, aunque la mayoría de su población es árabe y profesa la religión musulmana o católica. Tiene unos 75 mil habitantes, casi igual que Quillacollo; es más pequeña que Riberalta. Como otras poblaciones palestinas, sus habitantes padecen desde 1948 el desplazamiento constante.

            Belén queda en el centro de Cisjordania, en Palestina, al sur de Jerusalén. Es tan limitada como Patacamaya o como Camiri, pero es una de las ciudades más famosas del mundo. El Nuevo Testamento la cita como la ciudad que albergó en un humilde pesebre el nacimiento del Mesías, bajo el Imperio Romano. Ahí están vitales sitios sagrados para los millones de cristianos de todo el mundo.

            La mayoría de su población es árabe y practica la religión musulmana conviviendo con la minoría de cristianos ortodoxos desde siglos. Los treinta mil habitantes ocupan un espacio bajo la Autoridad Palestina, cercado por murallas y puestos de control del gobierno de Israel. Como miles de palestinos no tienen la libertad de salir o entrar y son hostigados permanentemente por los avasalladores judíos de asentamientos ilegales.

            Belén vivía del turismo, principalmente de los católicos europeos y latinoamericanos. La temporada alta era fin de año, en las proximidades de la fecha escogida para conmemorar el nacimiento de Cristo, 25 de diciembre. La Basílica de la Natividad era uno de los sitios ineludibles para los peregrinos.

            Desde hace algunos años (antes del 7 de octubre de 2023) los habitantes de Belén y los sacerdotes (franciscanos) que custodian los sitios sagrados denunciaron los permanentes abusos del personal de seguridad del gobierno de Israel y de judíos ortodoxos contra ellos.

            Avasallamientos y atropellos que este año han alcanzado límites incontrolables al punto que la mayoría de los hoteles cancelaron visitas, cientos de locales de comida o de alojamiento cerraron sus puertas. Como ciudadanos de Cisjordania, los palestinos en Belén viven bajo una prisión al aire libre.

            La violencia en este territorio palestino, igual que en el este de Jerusalén, aparece poco en los noticieros por ser menos numerosa que la catástrofe humanitaria en Gaza, pero no por ello menos dramática. Hace meses, por ejemplo, que el sistema israelí no deja que los enfermos de cáncer se curen en hospitales palestinos y prohíbe en Gaza máquinas de radioterapia porque señala que podrían convertirlas en armas.

            En la Franja, en sesenta días, más de 6. 500 Jesusitos han sido asesinados por orden de Benjamín Netanyahu y miles de miles han sido mutilados o han quedado huérfanos. Han sepultado en ocho semanas más niños que en todas las guerras del mundo del siglo XXI.

La conmoción mundial no toca a Tel Aviv. Al contrario, se anuncian más ejercicios: drones contra bebés; bombas contra camillas; metralla contra pesebres. Este 2023, como pocas veces desde la época de San Francisco, Belén no tendrá Navidad. No llegará la Buena Nueva a los hogares de piel canela y pestañas largas.

Las campanas no repicarán porque no habrá Noche Buena. Habrá más luto.

viernes, 1 de diciembre de 2023

JUAN CARLOS CALVIMONTES CAMARGO, EL FUNCIONARIO PANQUEQUE

 


            Juan Carlos Calvimontes Camargo (Sucre, 1964) es desde hace tres años el responsable de implementar políticas para prevenir, enfrentar y/o solucionar situaciones de emergencia en el territorio nacional. En teoría él debería conocer los métodos desarrollados en la atención de desastres y tener capacidad de reacción rápida.

            En cambio, el viceministro de Defensa Civil del Ministerio de Defensa es una persona que representa la tendencia del gobierno de nombrar a personas sin preparación para ocupar funciones en la administración pública. La designación de gente escasamente cultivada para las responsabilidades de determinado puesto es otra de las herencias del Movimiento al Socialismo (MAS). Tendencia contagiosa que se da en otros niveles del estado, como es el caso de la alcaldía paceña.

El presidente Luis Arce Catacora y el vicepresidente David Choquehuanca Céspedes demuestran una total incapacidad para superar ese mar de ignorancia que los acompaña desde su primer día. Cada designación revela que carecen de cuadros profesionales. Hay casos extremos como la ministra de Cultura o la flamante canciller.

            El Ministerio de Defensa a cargo de Edmundo Novillo es un ejemplo patético. Novillo Aguilar (Totora, 1963) fue un alcalde empeñado en sacar adelante a su pueblo, sobre todo cuando le tocó enfrentar los estragos por el terremoto en Aiquile. Como gobernador en 2010 no mantuvo esas cualidades. Como ministro demostró deslealtad a Evo Morales y se rodeó de personal inadecuado.

            Nombró responsable del VIDECI a uno de los peores funcionarios del pasado gobierno. Personaje que debe gozar de un sólido padrino porque es difícil entender por qué Juan Carlos Calvimontes Camargo ejerce tanto poder desde hace 18 años.

Calvimontes se presenta como un “médico progresista y humanista con profundo amor por la vida, la salud y la ecología, defensor de los derechos humanos de los humildes”. Sin embargo, ningún dato de su hoja de vida corrobra esta “trayectoria”.

En vez, Calvimontes ocupó titulares cuando fue designado ministro de salud porque se supo que tardó 26 años en estudiar medicina. Tampoco probó dónde se desempeñó como médico ni publicó los certificados que demuestran sus supuestos otros estudios superiores. En esa ocasión, afirmamos que difícilmente una persona consciente se haría examinar por un doctor con ese currículo. En cambio, se conoce que fue dirigente estudiantil en Sucre, seguramente como parte de los dirigentes abuelos.

En 2007 fue asesor de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). ¿Asesor de qué? El derrumbe de la principal empresa estatal comenzó con esas contrataciones. Recordemos a Guillermo Aruquipa que sabía cargar garrafas, pero no administrar una petrolera.

En 2008, Calvimontes fue asesor en el Ministerio de Obras Públicas. También trabajó como director Ejecutivo del Fondo de Solidaridad y Equidad en otra cartera del estado. Son todos espacios donde se manejan recursos económicos y materiales.

En 2011, Calvimontes fue nombrado director de Autonomías en el Ministerio de Autonomías, en una cartera clave para implementar uno de los aspectos novedosos de la Constitución Política de 2009 y fundamental para desarrollar las relaciones modernas de las regiones con el Estado. ¿Qué logró dejó?

En su última Declaración Jurada asegura tener una renta de Bs. 262.730, equivalente a unos 38 mil dólares americanos anuales. La Ley SAFCO y sus ocho sistemas prevén que el funcionario público debe además demostrar gestión con resultados y ser evaluado regularmente.

En 2012, Morales lo nombró ministro de Salud. En su gestión se alentó el decreto para obligar a los médicos a trabajar ocho horas provocando las protestas masivas de los galenos por la irracional medida. Aunque se presenta como defensor de derechos humanos, Calvimontes convocó a conferencia de prensa para “denunciar” que el tribuno Gualberto Cusi era seropositivo violando normas y códigos de ética internacionales. Ante el rechazo de la opinión pública, el ministro se defendió con el argumento que difundir que alguien está contagiado es “para proteger a la población”.

A pesar del escándalo, en 2017, Morales lo nombró presidente del Directorio de la Caja Petrolera y en 2018 ocupó otros puestos dentro del Ministerio de Salud. He buscado publicaciones, disertaciones, aportes que justifiquen este recorrido en tantas y tan diversas funciones públicas sin encontrar datos bibliográficos.

Este funcionario panqueque es desde 2020 el que debería enfrentar los estragos de los pirómanos de su mismo partido. En sus apariciones públicas se confirma que apenas tiene vocabulario para hablar (seguramente porque no lee); desconoce el sector de defensa civil y carece de experiencia en el manejo de riesgos. Difícil creer que ama los bosques, la fauna y la flora. Sólo sirve la foto para la autopropaganda.

 

viernes, 24 de noviembre de 2023

GUERNICA POR 5.500 POR 14.000 POR 25.000 POR 1.500.000

 

DESDE LA TIERRA

GUERNICA POR 5.500 POR 14.000 POR 25.000 POR 1.500.000

LUPE CAJÍAS

 

            Decenas de personas se detienen todos los días frente a un lienzo de ocho metros de largo y tres y medio de alto. El “Guernica” de Pablo Picasso, pintado en blanco, negro y tonos grises, es una obra de inmenso valor artístico con inspiración múltiple de grandes maestros. Aparte de esa importancia, es considerado el cuadro que resume las guerras del siglo XX.  Su trascendencia está en esas seis figuras humanas y tres animales que retratan el saldo del bombardeo de la aviación nazi sobre una pequeña población vasca durante la Guerra Civil española que causó 126 muertos.

            La figura sobresaliente es una madre aullando de dolor como toda madre que pierde un hijo. Alza los brazos extendidos en una proporción mayor de su pobre cuerpo desgarrado. Es posible escuchar su grito aún en medio de las multitudes que se agrupan para mirarla, comentar, señalar y suspirar. Ella se impone sobre todos los otros elementos.

Reclama al cielo que ha permitido que destrocen para siempre sus entrañas.

            Picasso pintó la famosa tela por encargo de los republicanos con la esperanza que el mensaje conmoviera a las democracias del mundo; para que se sepa lo que pasaba en su país. La mayoría de los gobiernos prefirió mirar a otro lado. Cuando poco después, Alemania invadió Polonia, era tarde.

            “Guernica” superó ese pasaje histórico aislado para convertirse en el símbolo de los horrores que la guerra provoca, sobre todo entre los más inocentes. No son los soldados que se enfrentan cara a cara, sino el poder de las máquinas de muerte que lanzan bombas sobre la población inerme.

            En 45 días, el ejército israelí ha lanzado miles de bombas sobre Gaza, la nueva “Guernica”; ha destrozado más de 200 mil viviendas, el 45 por ciento de todas las construcciones; ha obligado a más de un millón de palestinos a escapar en medio de gritos y llantos hacia un lugar de la nada; ha herido a al menos 25.000 personas, entre ellos muchos menores que llevarán las secuelas de por vida; en algunos casos familias enteras, hasta de 41 miembros, han sido asesinadas; ha matado a más de 14 mil civiles en el norte, en el sur y en el centro de la Franja para demostrar que ningún lugar es seguro. El conteo de la BBC, de UNICEF, de la ONU aumenta cada hora.

            El espectáculo más apocalíptico es el asesinato de 5.500 chiquitos en sus casas, en el refugio de sus escuelas, en las calles mientras huían llorando del sonido aterrador de las bombas. La masacre de niños no tiene precedentes, declaró el secretario de Naciones Unidas Antonio Guterres. (Aunque en 2021, Israel asesinó a 2.100 infantes y dejó ciegos o inválidos a muchos más en la última década). Las mortajas diminutas para envolver los cadáveres son la marca histórica de esta masacre; en Seúl han esparcido miles de calzados de niños y niñas para solidarizarse con los palestinos. El objetivo principal de la venganza israelí es el sistema de salud, sobre todo los grandes hospitales, Miles de personas movilizadas en todo el mundo, muchos médicos y enfermeras, exigen el cese del drama.

            Hasta ahora Israel no ha podido demostrar sus pretextos para atacar más de 300 centros sanitarios, como sucedió con Estados Unidos cuando desangró Irak con el fantasma de las armas nucleares. Para encontrar 10, 50, 100 combatientes de Hamas el ejército de Tel Aviv ha tenido que matar a enfermos y a madres en el hospital de Al-Shifa; para mostrar 30 armas, Benjamín Netanyahu ha dejado sin electricidad las incubadoras de bebés prematuros; sin agua potable a las salas de cirugía; sin alimentos a dos millones de gazatíes.

            Decenas del personal de salud palestino han muerto defendiendo la vida. Son los nuevos héroes de esta otra invasión del Siglo XXI. Después de estas semanas, ¿qué gobierno democrático levantará su dedo contra Vladimir Putin: ¿Macron? ¿Biden? ¿los alemanes que incluso han quitado el premio a una narradora palestina en Frankfurt y han corrido a ofrecer armas a Netanyahu? ¿acaso esta larga tragedia no es consecuencia histórica de las acciones centenarias de Francia, Gran Bretaña, Alemania y Estados Unidos?

            Como Herodes hace 2023 años, que mandó asesinar a dos mil menores de dos años por miedo a un recién nacido. Otra vez, María y José tienen que escapar a Egipto con su niño en brazos. La Media Luna Roja Palestina ha conseguido evacuar a 31 de ellos, que pesan entre 800 y 1200 gramos. Ese esfuerzo ha abierto el milagro, porque Nour al- banna ha encontrado a sus mellizas prematuras Leen y Layan, igual que otras doce mamás han vuelto a ver a sus pequeños. El resto de los bebés no sabrá quizá nunca si sus padres murieron, si tienen hermanos, si valió la pena arribar a este planeta.

            Picasso, en medio de la mortandad en Guernica, pintó dos elementos: una débil lucecita para iluminar la tristeza. Y una flor sencilla, como el trazo de un escolino, que abre sus pétalos con la esperanza de un nuevo amanecer. En España, la aurora tardó medio siglo en aparecer. ¿Qué pasará en Gaza el día después?

 

 

viernes, 17 de noviembre de 2023

Dr. DAVID JEKYLL Y Sr. HYDE CHOQUEHUANCA

 

            En el vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia, David Choquehuanca Céspedes (Huarina, La Paz, 1961) es el mejor representante del doble discurso que defienden el Movimiento al Socialismo (MAS) y grupos autodenominados “pachamamistas” desde hace 40 años. Palabras transformadas en acciones desde enero de 2006 cuando asumieron el control del gobierno central, después de participar en elecciones democráticas liberales. Acciones que han hundido a la patria en humo y sequía.

            Choquehuanca, con un bolo de coca en la boca, junto con el presidente Luis Arce y el ministro Edgar Montaño, dan la bienvenida a los turistas en gigantografías que cercan el aeropuerto “Viru Viru” en Santa Cruz. En vez de imágenes de la belleza de la naturaleza diversa, el visitante se encuentra con este trío rompiendo una vasija. ¿Representan a Bolivia? ¿Qué pasará cuando cambien al ministro agitador de turbas? ¿Es Choquehuanca el rostro de los originarios de estos territorios?

            David Jekyll, el antiguo dirigente sindical habla de la Madre Tierra, del respeto a la diferencia, de la obediencia a las bases. Conmueve a guardianes de ongs, a religiosos antropólogos, a mujeres sensibles, a la prensa argentina. Se presenta amable y conciliador.

            En las últimas semanas, seguramente con fondos públicos, está en campaña en varias radios urbanas. Convoca con voz grave a la unidad, a las bases, “sin ellas no somos nada”. En su último mensaje al país repitió sus líneas de otros momentos: reconciliación, respeto, unidad.

            David estudió en una escuela rural la primaria y la secundaria. Como muchos jóvenes campesinos no logró vencer ni el primer año en la Normal Simón Bolívar, En cambio, consiguió ser dirigente estudiantil y desde hace 40 años se dedica a la política. Aunque no tiene títulos de pregrado, consiguió apuntarse en diplomados. También recibió formación en Cuba y liderizó un programa de una ONG, cuyos colegas obtuvieron puestos públicos a su lado.

            Transforma su nombre de origen bíblico en aimara “Llawi Chuquiwanka Sispiris”, aunque es difícil encontrar sustento de ese giro. Mandó cambiar las manecillas del reloj del Palacio Legislativo, como un signo snob más que científico y sin aparente relación con el “vivir bien”.

            Aunque fue ministro de Relaciones Exteriores durante varios años, no era el responsable de la política exterior. Parecía el típico florero de adorno. En 2011, pudo ayudar a los indígenas de tierras bajas que defendían el bosque y el pulmón de Bolivia, pero se volvió Sr. Hyde y sirvió para la trampa represiva en Chaparina.

            En la ciudad habla del Vivir Bien; en sus múltiples giras por el campo alienta el odio. No conozco un seguimiento a todos sus paseos financiados por la Vicepresidencia. Cuando algún periodista o algún asistente reproduce sus palabras, él intenta justificarse. Por ejemplo, cuando insiste que el estudio no es importante o cuando afirma que los citadinos son flojos y no se cortan ni su cabello.

            En entrevistas, bajo la personalidad de Jekyll habla constantemente de la Madre Tierra. Cuando asoma su doble de Hyde no hace nada para frenar las políticas de estado de Evo Morales y de Luis Arce/Edmundo Novillo para incendiar la floresta. Es corresponsable de las normas aprobadas para alentar que avasalladores quemen pastos y montes para traficar con la tierra.

            En la Vicepresidencia funciona una Unidad para la Defensa de la Madre Tierra, sin que se sepa qué hace o cómo sus actividades contrastan con los beneficios que se dan a los señores feudales del oro para que avasallen áreas protegidas.

            El Sr. Choquehuanca Hyde no se interesa por mantener una presencia respetuosa cuando preside el Congreso Nacional. Hosco, silencioso, sin argumentos, observa escondido en una chamarra oscura, como si estuviese en una terminal de buses.

            En torno a su figura se ha tratado de crear el mito de que los indígenas llegaron al poder. Los hechos demuestran que Choquehuanca está lejos de representar la cosmovisión armonioso y amable de los nativos, sobre todo la personalidad de los de tierras bajas.

            Su ignorancia en varios asuntos se esconde con el discurso del racismo, pretexto que usan muchos para disimular desaciertos. El año pasado publicó un libro sobre la “Geopolítica del Vivir Bien”, donde firma con la personalidad de Jekyil describiendo un hermoso mundo. En las recepciones, el Sr. Hyde obliga a los diplomáticos a escucharlo cantar.

            En las próximas elecciones, los bolivianos no podemos elegir a líderes con doble personalidad. El país necesita representantes de la totalidad del territorio, que puedan sentirse tranquilos en un campamento minero o en una cena ejecutiva, que disfruten del calor sin disfraces. Basta de puñaladas traperas escondidas en cofres de espejos rotos.

viernes, 10 de noviembre de 2023

EL NO ESTADO EN SU ESPLENDOR

 


            Esta semana, los bolivianos contemplaron resignados la celebración del No Estado en todo su esplendor. El festejo tuvo las luces de los incendios provocados en las tierras bajas que ocupan el 60 por ciento del territorio nacional. Los brindis se sellaron con el estallido de petardos y dinamitazos en la sede de gobierno.

            Decenas de personas obedecieron la política del No Estado de prender fuego a los árboles que obstaculizan las plantaciones de coca, la hoja sagrada que es el eje articulador del régimen plurinacional. Con eficiencia y sentido de oportunidad, hombres y mujeres supieron atizar en las guaridas de jaguares salvajes, de aves silvestres, de culebras y murciélagos, de usinas y ciervos.

            La orden de reconvertir las áreas protegidas y las tierras comunitarias de origen en páramos y cementos se originó desde 2006 con la inspiración de Juan Ramón Quintana y su prédica contra el ecologismo imperial. En 2011, se cumplió la fase más significativa (con respaldo del brasileño Luis Ignacio da Silva y su Partido de los Trabajadores (PT) para partir en dos el pulmón de Bolivia. El estrangulamiento del TIPNIS develó el verdadero sentido de la Madre Tierra y del Vivir Bien.

            Con el nuevo gobierno, esa visión está fortalecida con un enorme aparato desde las oficinas públicas. Los avasallamientos de tierras son apadrinados por el INRA, por el Viceministerio de Tierras, por la ABT. Ramiro Guerrero, Edmundo Novillo, y el polivalente Elías Tejerina Frías y sus familiares son una de las piezas claves. Ese oscuro personaje que de viceministro pasó a avasallador y después a empresario firmando contratos con EMAPA y otros. Asuntos que nunca investigará el viceministerio de Transparencia, tan transparente que no existe.

Luis Arce nombró responsable del cuidado de los bosques a un abogado sin antecedentes relacionados con el medio ambiente. Al contrario, Luis Roberto Flores Orellada, fue relacionado con un polémico caso de narcotráfico. Cuando un periodista le solicitó dar su versión, le pidió que consiga requerimiento fiscal, mientras grababa al comunicador. Parece que es un profesional que no se ha enterado cómo se hacen las entrevistas periodísticas. Asegura que él lucha por el pueblo.

En la sede de gobierno, los señores feudales del oro y del mercurio, prepararon un teatro callejero. Quieren apoderarse de las tierras de los nativos que no son aimaras y quechuas; quieren quemar los parques y las serranías; usar su alquimia para volver ríos cristalinos en corrientes amarillas; adueñarse de las fuentes de aire y de agua para las futuras generaciones,

Todo el que se oponga a sus planes es sometido al castigo: niños que quieren ir al colegio, periodistas que cubren noticias, empleados legales que deben marcar tarjeta, industriales que intentan garantizar la producción de alimentos, transeúntes.

Ensuciaron los parques con sus porquerías, dejaron restos de pollos y papas fritas en las avenidas, afectaron maceteros y rotondas. Si no les importan los arroyos, cómo les van a conmover las kantutas. Para eso están las barrenderas. Los señores feudales están ocupados con sus alquimias.

Hace demasiado tiempo que el Servicio Nacional de Áreas Protegidas está en manos de personas ajenas al respeto a la Naturaleza. Abel Mamani, aquel funcionario que nunca defendió ni una plaza alteña ni cuidó a la fauna, logró desbaratar la institucionalidad. Cada director es más ignorante que el anterior. Únicamente sirven para crear puestos para sus allegados iletrados.

El No Estado no controla gran parte del territorio nacional. Los bolivianos que planean viajes de turismo interno no pueden estar seguros de llegar al Chapare, a San Matías, a los parques nacionales con fronteras internacionales, al Desaguadero, a San Julián, al Guanay, a Tipuani, a comunidades del norte potosino.

Luis Arce Catacora y David Choquehuanca quedarán en la historia como los mandatarios que suicidaron al país que una vez tuvo cielo azul y hoy es el tercero más contaminado.

viernes, 3 de noviembre de 2023

GAZA, UN CEMENTERIO DE NIÑOS

 


            La reacción del gobierno de Benjamín Netanyahu contra el ataque de Hamas a civiles judíos ha superado todo límite. Las organizaciones internacionales de Derechos Humanos, UNICEF, Amnistía Internacional, el Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, la Corte Penal Internacional, Reporteros sin Fronteras han denunciado el excesivo uso de la fuerza de los militares israelíes matando a civiles palestinos. Entre ellos están una treintena de periodistas y sus familias.

            En septiembre pasado, escribí en esta misma columna la situación de los niños palestinos por la política sionista. Human Rights Watch denunció que más menores en Gaza y en Cisjordania eran asesinados o secuestrados, torturados y asediados por los militares sin respeto a la legalidad.

            Las organizaciones internacionales nombradas están lejos de defender a terroristas o de alineación ideológica. Sin embargo, Israel se negó constantemente a reconocer esos informes. Al contrario, sus autoridades civiles y militares acusaron a cualquier denunciante de ser antisemita, de servir a los grupos armados, de ser utilizado por Irán. Israel no acepta ningún tribunal internacional.

            Antes del 7 de octubre, existían cantidades de chicos palestinos atendidos por psicólogos por los traumas que tenían. Fueron testigos de la muerte de sus familiares, del hostigamiento y humillación de sus padres, de sus dificultades para estudiar, para jugar.

            En esta semana, un mes después de los asesinatos de Hamas en territorio israelí (incluyendo a bebés, niños, adolescentes y jóvenes pacifistas), Tel Aviv ha multiplicado las muertes geométricamente. Han fallecido por lo menos 9 mil palestinos, hay miles de heridos y 200 mil viviendas destruidas.

            Uno de los objetivos se ha centrado en los centros de salud. Observadores internacionales denunciaron que las tropas judías asediaron a hospitales al menos en 131 ocasiones. Los médicos operan sin luz, sin anestesia, con medidas medievales porque Israel cortó la luz, el agua, el ingreso de gasolina. Han bombardeado a hospitales donde estaban refugiados miles de mujeres con sus hijos.

            Al menos la mitad de los muertos son bebés, chiquitos menores de cinco años y niños menores de doce años. Los padres corren desesperados con cuerpecitos sangrantes con la esperanza de encontrar algún auxilio que no llegará. En las morgues se acumulan pequeñas bolsas blancas escondiendo el horror.

            Los alteños o los cruceños no podrían seguir viviendo si en tres semanas se abren 4. 000 fosas para niños asesinados con violencia extrema.

            Otros menores han quedado solos porque toda su familia ha muerto bajo los bombardeos israelíes. Explicaba la responsable de Naciones Unidas en Gaza que son cientos de chicos que ahora deambulan sin recobrar el habla, anulados por las tragedias que han presenciado. Otros son llevados para reconocer el cadáver de su madre o de sus hermanitos.

            ¿Qué hicieron para ser víctimas de bombardeos, metrallas, disparos? Los terroristas pueden ser ajusticiados in situ o condenados a morir por tribunales. Nadie juzgará a los generales que envían bombas contra las familias palestinas. En esta semana también está la denuncia internacional del uso judío de fósforo blanco contra la población civil palestina. Las fuentes de esta información son agencias oficiales europeas.

            El vocero de UNICEF describe la situación como un gran cementerio de niños.

            Paradójicamente, la acción de Hamas ha logrado reponer el asunto palestino en la agenda mundial. Miles de miles de ciudadanos en capitales de los cinco continentes han salido para apoyar a Palestina. Seguramente Hamas no se recuperará ni logrará reconocimiento por la forma de sus ataques. Sin embargo, la respuesta israelí también es un suicidio político.

            El argumento del antisemitismo para rechazar la movida mundial pro Palestina no sirve. Sobre todo, no afecta a personas o a países que no tienen deudas con la nación hebrea, como sucede con Francia o con Alemania.

            El bumerán es el respaldo a la causa de Gaza de presidentes represores como Nicolás Maduro. Es difícil aceptar que el presidente Luis Arce rompa relaciones con Israel por un interés nacional. Más bien, es posible pensar que hubo una llamada del embajador ruso o del embajador iraní Bahram Shahabeddín al incompetente canciller Rogelio Maita.

            Si hubiese una línea de defensa a los inocentes invadidos, Bolivia debería cortar relaciones con Rusia. En cambio, Mikail Ledenev tiene más poder que Robert Gelbard hace treinta años.

            Shahabeddín llegó hace tres meses, pero la República Islámica de Irán es el único estado en la historia de los medios bolivianos dueño del canal de TV Abya Yala, regalo al cocalero Evo Morales, refugio de los periodistas “panqueques”.

            Esas jugadas geopolíticas no tienen interés en la urgente tregua para salvar a la niñez de Gaza y Cisjordania.

 

 

viernes, 27 de octubre de 2023

LA CARPITA LILA: NI PATRIA, NI MUERTE

 


            Una de las imágenes más grotescas de la huida de Evo Morales, en noviembre de 2019, fue su escondite bajo una carpita lila, acostado sobre una frazada envejecida, en algún lugar de los cocales en el Chapare, al centro de Bolivia.

            Sus seguidores, dentro y fuera del país, mostraban la foto como representativa del grado de pobreza y de persecución que sufría. Cualquier persona con sentido común sabía que era una puesta en escena. En esos días, en los registros oficiales figuraban sus rentas con varios miles de bolivianos, además de ostentar el disfrute del poder por más de 13 años; pobre no era, ni es. Morales, formado en las luchas sindicales y políticas, asesorado por la inteligencia cubana y venezolana durante toda su presidencia, podía haber escogido un refugio más seguro.

            La carpita, como circuló en las redes, tenía un color intenso, de esos plásticos con los que las colegialas aman forrar sus carpetas. Estaba tensada con cuerdas improvisadas. Si alguien lo hubiese perseguido, rápidamente hubiese encontrado la huella; faltaba un letrero: “Aquí estoy con mi celular prendido”.

            En las últimas horas como mandatario, el veterano líder de los cocaleros aparecía cada vez más aislado de las bases que lo aclamaban. Algún día, los protagonistas contarán los hechos de esas jornadas, quién o quiénes tomaron las decisiones. Militantes masistas culpaban a Álvaro García Linera y a Carlos Romero Bonifaz como traidores; el primero ya está apartado de Evo, el segundo sigue en sus filas.

            El escape desilusionó a otros que esperaban una actitud diferente, o diálogo o resistencia. ¿Dónde quedaba la consigna de “patria o muerte” que se obligaba a corear a los militares? ¿Por qué temblaba el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas? Antiguos dirigentes con experiencias clandestinas en las dictaduras no acreditaban semejante desenlace.

            Lo más extraño y silencioso es la reacción de los personajes que se asilaron. ¿Qué asustaba a Juan Ramón Quintana? ¿Por qué Héctor Arce buscaba el exilio, si no era de los grupos de choque? ¿Qué impulsó a Hugo Moldís, que convive como periodista, a encerrarse meses en una embajada?

            De ello, lo más siniestro es la desaparición sutil de los equipos que dirigían y coordinaban a los guerreros digitales desde sus despachos oficiales. Hombres y mujeres, casi todos jóvenes, entrenaban en los parques públicos, para alentar campañas de desinformación; era fácil darse cuenta de sus conspiraciones, escondidos entre los arbustos.

            El asunto de estos funcionarios públicos y su grado de responsabilidad convocando al enfrentamiento entre bolivianos no aparece en las investigaciones judiciales. En algún momento se sabrán todos los detalles.

            Luis Arce buscó protección y -quizá al darse cuenta de que el ánimo de Jeanine Añez no era priorizar la venganza- salió, viajó y enfrentó la realidad. Incluso soportó a personas (quizá pagadas) que lo hostigaban en el aeropuerto. Esa es su ventaja histórica.

            La ciudadanía destacó la valentía de los dirigentes y parlamentarios que se quedaron, que aceptaron la derrota, que buscaron caminos de diálogo. A ello se sumaron otras voces que ayudaron a salir de la confrontación. Destaca el rol de representantes diplomáticos de España y de la Unión Europea que se jugaron para que Bolivia no sea ensangrentada. La Iglesia Católica retomó su esencia de mediadora.

            La salida de Evo Morales y Álvaro García Linera, que intentaban inconstitucionalmente continuar su mandato (ya ensombrecido por sus candidaturas en 2014) fue, paradójicamente, un alivio. Alejó situaciones feroces como las que padecen los nicaragüenses o los venezolanos.

            Con todas las sombras y las acciones autoritarias, los bolivianos viven más tranquilos que bajo las dictaduras militares fascistas. Muchos militantes masistas colaboran en esa convivencia. Hay que reconocerlo.

viernes, 20 de octubre de 2023

LABORATORIO ESTATAL, CRÓNICA DE UN FRACASO ANUNCIADO

 


            Con sonrisas y maquetas el gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) presentó una nueva empresa estatal, cuyas características anuncian que no solamente será otro fracaso, sino el más absurdo de los errores. El D. S. 5040 crea la Empresa Pública Productiva Laboratorio Industria Farmacéutica Boliviana (LIFAB) para producir medicamentos de “base química, natural y tradicional”.

            El periódico “El Pueblo” adorna la noticia con una fotografía que parece del desierto marciano, con un cielo nublado, unas colinas con contados arbustos y en medio una fantástica maqueta gris y blanca. Galpones, ingresos y pasadizos, ventanitas, un inmenso parqueo donde por el momento sólo dibujaron un camioncito, un gran letrero verde: “Industria Farmacéutica Boliviana”, a un lado una tricolor sin flamear y al otro una wipala cuadrada.

            Esperé que las organizaciones locales y nacionales de los empresarios y de los industriales publiquen una protesta firme y contundente a este nuevo engendro, pero solamente hubo quejas aisladas del sector y algunos comentarios de prensa.

            La empresa depende del “Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas” (SEDEM) y quedará en Cochabamba (Santivañez y Sacaba). El presidente Luis Arce anunció, sonrisa amplia, que la funda considerando los “conocimientos y saberes ancestrales de nuestros pueblos”.

            El Tesoro General de la Nación entregaría más de tres mil millones de bolivianos para la iniciativa. El ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural Néstor Huanca justificó la iniciativa por el costo de la importación de medicamentos y la escasez durante la pandemia. Otros medios estatales o paraestatales destacaron la obra como parte de la política oficial de “industrialización y sustitución de importaciones”.

            ¡Qué impostura! ¡Qué ignorancia!

            En primer lugar, basta recorrer los titulares de hace 18 años cuando Evo Morales aseguraba que la hoja de coca sería industrializada para producir mates, píldoras, champús, detergentes. Ni siquiera las investigaciones privadas, anteriores al MAS, consiguieron buenas ofertas. El único resultado fue más polvo blanco. Morales quiso armar un laboratorio farmacéutico que escondía un plan para traer “científicos” cubanos.

            En segundo lugar, como repiten los expertos con cifras y datos duros, las empresas estatales sólo sirvieron para cortar cintas, tomar trago y sacar fotos. Ninguna es exitosa y menos es confiable.

            La industria farmacéutica es compleja, necesita expertos no buscapegas. Es delicada porque juega con la salud de la población. No es lo mismo crear puestos para ignorantes en la cancillería que conseguir titulados que trabajan en delicadas investigaciones y pruebas. No será posible hacer farras como ocurre en los ministerios.

            Esta es una de las industrias bolivianas más prestigiosas y emblemáticas. La población confía en ellas y siente orgullo por varios de sus productos. Hace 30 años que me interesé por estas empresas por esas características; están en La Paz, en Cochabamba, en Santa Cruz, cubren el mercado nacional y también exportan.

            Los grandes laboratorios del mundo científico controlan las cadenas de producción de sus pares bolivianos, desde el ambiente impoluto, la construcción adecuada, la vestimenta especial para cada obrero, el control de calidad en cada paso. Un suero, un algodón, una gasa, una gragea, un jarabe tienen que ser perfectos, con todo el detalle explicado, con prospectos preventivos, con fechas de vigencia.

            También hay laboratorios que producen medicamentos con base en plantas como la manzanilla o la equinácea. Incluso hay farmacias que preparan pomadas externas o medicamentos genéricos sencillos, todo bajo estricto control.

            ¿Por qué el presidente Arce quiere meter dinero a otro elefante negro? ¿cuál es la verdadera razón? ¿Crear algo para contentar a municipios cochalas y contrarrestar al Chapare? ¿Traer rusos y chinos o iraníes como en el hospital alteño? ¿Aumentar el número de funcionarios públicos que aportan al partido y van a cabildos? ¿Hacer creer que hay industrias estatales?

            ¿O quiere hundir a la iniciativa privada?

            ¿Qué laboratorio se atreverá a tener planes para nuevas inversiones, ampliar sus plantas, crear sucursales, de buscar mercados externos si enfrenta la competencia desleal y nociva de este bluf?

            En vez, Arce, que no fue solamente cajero sino burócrata formado en la aplicación de las políticas de estabilización, podría apoyar más a la industria boliviana que crea empleos estables, paga los impuestos que financian sus sueldos, las universidades, los proyectos sociales.

            Ojalá que los empresarios no bajen la cabeza y reclamen con fuerza contundente, antes de que sea tarde.